Pandorum
Pandorum es un vibrante thriller de sci-fi y terror dirigido por Christian Alvart y producido por Paul W.S. Anderson. En el mismo, nos cuentan como dos miembros de la tripulación de una nave espacial, el Teniente Payton (Dennis Quaid) y el Cabo Bower (Ben Foster), despiertan en sus cámaras de hibernación sin recordar nada de lo que ha sucedido y totalmente desorientados. No saben quiénes son, ni cuál era su misión ni por qué, en principio, son los únicos supervivientes.
A partir de una premisa que engancha arranca un film de terror en el espacio, directo y sin concesiones. El espectador ha de ser consciente de lo que va a ver. Es otra más al estilo Alien, Sunshine u Horizonte final (cito estas por ser las más evidentes) pero con una historia bien elaborada que, aunque repite ideas de sus modelos, se ve con sumo agrado al indroducir elementos, tanto conceptuales como visuales, de enorme valor e interés.
La película es asfixiante y oscura, y en ella lo primero que hay que destacar es ese impresionante diseño de producción. Los primeros minutos son angustiosos, y aunque a medida que avanza el film se va derivando más hacia la acción y el desenfreno, el suspense y la tensión se mantienen prácticamente hasta el final de la cinta, donde todo queda explicado a la perfección, cerrando un círculo narrativo con uno de los mejores finales que he podido ver en las producciones fantásticas de esta última temporada.
Para ver Pandorum hay que dejarse llevar, porque la información nos va llegando con cuentagotas y tenemos un buen riesgo de perdernos. Hay que concentrarse ya que todo se antoja extremadamente confuso y turbador. Puede que esta maniobra por parte de los guionistas sea un juego peligroso, pero hace que aumente el interés en el espectador con cada minuto de película que transcurre.
No sólo tenemos una buena historia y un buen guión, también hay que destacar unos impresionantes FX en los que, menos mal, no canta el ordenador. Hay mucho efecto artesanal, lo que es muy de agradecer, especialmente por los aficionados más tradicionales, entre los que me cuento. Los decorados e interiores en los que se desarrolla el film, además de oscuros y siniestros, resultan sucios, decadentes y apocalípticos. Hay mucha violencia, mucha acción y vertiginosas secuencias que ponen los pelos de punta.
En el apartado interpretativo, simplemente hay que decir que, tanto Ben Foster como Dennis Quaid, hacen un buen trabajo.
Pandorum es un excelente film que los aficionados a la buena sci-fi no deberían dejar pasar porque tiene un montón de valores artísticos que justifican su visionado. Brillante de principio a fin.
Un 8.
Lo mejor: La ambientación.
Lo peor: Resulta demasiado confusa.