Los 4 Fantásticos y Silver Surfer
Siempre que veo el cartel de los fantásticos estos, pienso en cual sería mi superpoder preferido. El de piedra me parece que no me mola mucho. Muy cachas pero no mola. El elástico está bien para pillar las birras del frigo sin tener que moverte del sofá. Mola. El de fuego caca de vaca, si mi santa se enfada si ve un chinazo en el sofá no me imagino si ve que he quemado el sofá entero de un pedo. Me quedo con ser invisible, que además que puedo ir en pelotas todo el día, puedo cumplir todos los sueños de mente adolescente en cuerpo de señor con bigote.La película trata sobre una amenaza que viene a destruir la Tierra. No se trata de un misil, ni asteroide, ni marcianos con cuernos, si no una cosa que se come planetas como me como los cacahueses del aperitivo. Para ir preparándolos, pelándolos y quitándoles las pepitas a los planetas, manda primero a Silver Surfer, un surfista plateado en pelotas. Así que los 4 fantásticos, ayudados por uno que debía ser el malo en la primera y el ejército de los tontos, deben salvar a la Humanidad. ¿Merecemos tal ayuda o debemos sucumbir?
La cinta en si en un poquito pastelosa, con una boda entre superheroes que nos quiere mostrar que ellos tienen sentimientos. Los ratos de acción son bastante majos, pero le sigue sobrando diálogo y faltando mamporros. Gracias a Dios han dejado de lado ciertos chistes que eran más que horribles, patéticos. Y por no hablar de los del ejército, que son para darles de patadas en los mismísimos cataplines desde aquí hasta Saturno. Oye, pobre Saturno, que se lo come el bicho come planetas. Un minuto de silencio por el planeta anillado.
Resumiendo, película sobre 4 fantásticos que tienen que librar al mundo de una amenaza que lo quiere destruir. Algo mejor que la primera entrega, pero sigue siendo muy dirigida a un público demasiado infantil como para gustar a los adultos.
2 mías y una de mi niña.
Besitos.
P.D: Al terminar la película vislumbré la crítica con claridad meridiana y vi cómo le cascaba 2 estrellas como que me llamo Chinchán. Pero vino mi medio calabacín y me dijo ha estado muy bien, ¿a que sí? Poniéndome en mi papel de hombre dice, si cariño, si. Así que le vamos a poner 3.