María Antonieta
Después de ver la estupenda Lost in translation, uno podía tener esperanzas muy altas con el nuevo proyecto de la hija de Francis, Sofia Coppola. Al menos, yo las tenía. Pues resulta que su nuevo proyecto, para ella, el cierre de la triología de la incomprensión, se basa, no en la historia de unas hermanas jóvenes ni en dos individuos perdidos en Tokyo, sino en la vida de María Antonieta, la que en su momento fue reina de Francia. Esta asombrosa decisión, según ella, se basa en el retrato de una joven incomprendida en la corte con un estilo propio de la directora. Para mi, se basa en el retrato de un ser incomprendido en una corte que no comprendía a nadie y en el exceso de pasteles, encajes y flores. Pero ante todo, María Antonieta presenta una delicada puesta en escena (prácticamente perfecta), unas actuaciones formidables, una fotografía preciosa y una música elegida con un gusto exquisito.El guión quizás presente un ritmo excesivamente lento y repetitivo, pero ya me diréis qué más se puede contar de la vida de una adolescente que vive de pasteles y encajes. Así que lo que se hecha a faltar son relaciones más profundas entre la corte, debates políticos (aparecen, pero muy superficiales)… En mi opinión, creo que Coppola podría haber sacado muchísimo más provecho, no de la jovencita, sino de todo lo que le rodeaba, aunque no le perteneciera. Vale, es entretenido y cool grabar pasteles, zapatos (¡atentos a las All Stars!) y encajes, pero creo que la directora de Lost in translation podría haber llenado este vacío que tanto se nota en la historia. Aunque es cierto que el guión no es malo, ni mucho menos. Me refiero a que puede que sea un tanto vacío, pero mal estructurado no está. Pese a su lento ritmo y algún que otro bajón, es un film totalmente innovador y cautivador. Aunque esto, creo que se debe más a su estilo que no al guión.
Pasteles austriacos, flores, vestidos y rock and roll.
Algunos criticarán el estilo de la hijísima de Coppola diciendo que es vacío, pijo y desmesurado. ¡Pero vamos a ver! En sus películas, para mi, lo que más influye es el estilo. Así que entras o no entras. Yo entré en Lost in translation, y me quedé maravillado. Su segundo largo transcurría en el siglo XXI, o sea, que no era un film de época. María Antonieta, evidentemente, sí lo es. Y uno se preguntará: ¿cómo plasmará su modernísmo estilo en un film de época?. Pues muy sencillo. La cuestión está en tener buen gusto para añadir música moderna en escenas de época y hacerte creer que la sociedad no ha cambiado tanto. Y para mi lo consigue. Es más, el estilo popero del film es lo que más me atrae. Quizás en ocasiones se exceda (sobretodo con mostrar zapatos y vestidos) pero es que realmente es de lo que vivían ese conjunto de “animales” de la corte. Aunque he de decir que lo mejor de todo es la música. Aparecen canciones de New Order, The Cure o Gang of Four, y todas ellas son excepcionales (destacando Celebration, del primer grupo). Aunque también se introduce música del siglo XVIII, supongo que para no cargar demasiado al personal. Sin duda, la mejor escena con música moderna es la del baile de máscaras, con una canción de Siouxsie and the Banshees, totalmente incréible.
Se le ha acusado a Sofia Coppola de no retratar al pueblo (que en esos momentos estaba tocando la pobreza). Yo creo que lo retarta poco, al igual que la corte y los sucesos políticos, pero también pienso que la escena clave del film es esa en que María Antonieta asume su derrota mostrándose ante el pueblo, que pretende asesinarla. Es una escena excelentemente rodada y que cuenta más de lo que parece, al igual que el delicado y arriesgadísimo plano del cambio de cuadro (quien la haya visto ya sabrá a qué me refiero). Así que, en definitiva, he de decir que la película falla cuando se excede y en cambio, cuando resume un hecho importante en una pequeña secuencia, es cuando resulta más increíble.
Otro punto absolutamente destacable es la sublime interpretación de Kirsten Dunst. Su papel, pese a contener sentimientos totalmente vacíos, está interpretado con maestría y sentido común. Sin duda, la actuación de esta chiquilla se merece algun premio, aunque dudo que se lo den. También son estupendas las apariciones de Jason Swartzman y Judy Davis (¡qué envejecida está!), en unos papeles totalmente diferentes pero muy peculiares.
En conclusión, podría afirmar que María Antonieta es bastante mejorable, tanto en el aspecto de la solidez del guión como en la, a veces aparente falta de sentimientos que hay detrás de las cámaras. Pese a todo, tiene un diseño de producción admirable y un estilo con un gusto exquisito.
Lo mejor: Su inmejorable estilo moderno y Kirsten Dunst.
Lo peor: La falta de solidez de las historias que rodean a la protagonista.