Los muertos no mueren
Soy un gran admirador del cine del maestro Jarmusch, pero no me gustan las películas de zombies. Creo, de hecho, que nunca he ido al cine a ver ninguna. Por eso, cuando me enteré de que la próxima película del de Ohio trataba sobre estos torpones muertos vivientes, me llevé una buena decepción. Aun así, he ido a verla y… ES MUY MALA. No se salva nada, ni la trama, ni los personajes, ni los chistes… ¡No la salva ni Bill Murray!
No entiendo que el director se haya metido a hacer una película de zombies más allá de por el hecho de hacerla con familiares y amigos y pasárselo bomba durante dos años, pero ¿el resultado? Una cinta totalmente prescindible y una mancha en su brillante carrera.
Jarmusch, no te pedimos, ya, que vuelvas a tu cine de hace treinta años, a maravillas como Extraños en el paraíso (1984) o Noche en la Tierra (1991), pero sí que retomes la línea de Paterson (2016), tu última gran película. Te perdonamos todo, pero no te vengas demasiado arriba con estas licencias que te tomas.