Noche en el museo
La simple idea de que por la noche, cuando todos los visitantes se han ido, las figuras de un museo cobren vida, ya es algo que llama la atención y que de un modo u otro, todos nos lo hemos planteado o pensado sobre muchas cosas.Este es el arranque de esta película de Shawn Levy, (Doce en casa, La pantera rosa), que cuenta con un reparto muy interesante y consagrado como son Ben Stiller, Robin Williams, Carla Gugino, Owen Wilson, Dick Van Dike, Mickey Rooney y Bill Cobbs entre otros.
Larry Daley, interpretado por Stiller, es un padre divorciado, que harto de andar de trabajo en trabajo, y ante la posibilidad de tener que trasladarse y dejar de ver a su hijo, decide aceptar el puesto de vigilante nocturno del museo de historia natural de Nueva York.
Una vez allí conocerá a los antiguos vigilantes (Van Dike, Cobbs y el mítico Rooney) que le darán un par de consejos antes de dejarle “solo”.
Tras habituarse al lugar y comenzar a hacer el ganso, Stiller se da cuenta de que algo no es muy normal, y que por las noches todas las criaturas del museo cobran vida.
Desde un tiranosaurio Rex, a legiones diminutas de romanos, vaqueros e indígenas mayas, hasta Atila y los hunos, pasando por Mamuts, Vikingos, hombres de neandertal y el presidente Roosevelt, interpretado por Robin Williams.
Con claras reminiscencias a “Jumanji”, aunque en un nivel inferior, “Noche en el museo” se presenta como una entretenida aventura para todo los públicos, que lo pasarán en grande viendo todo lo que ocurre en ese museo, y en parte deseando que nos hubiese pasado esto cuando éramos pequeños.
Daley tendrá que encargarse de todos los problemas que generan los inquilinos del museo, además de otras tramas y conflictos que se le plantean, y que tendrá que hacer frente antes del amanecer.
Es cierto que hay algunas lagunas, partes de guión bastante flojas o hasta incoherencias, pero nadie viene o pretende encontrarse con “El padrino”, y especialmente el público a quién está destinada no es tan exigente, así que los objetivos y campos en los que tiene que destacar, lo hace y sobradamente.
“Noche en el museo” cuenta con unos efectos especiales muy buenos, no obstante cuenta con el supervisor de este departamento de la trilogía de “El señor de los anillos”, así como la empresa “Rhythm & Hues”, encargada de “Las crónicas de Narnia: el león, la bruja y el armario”.
También es de ensalzar el equipo de producción y arte, ya que recrear un museo de estas dimensiones no es tarea sencilla.
El final es el punto más infantil de toda la película, pero pese a esto, “Noche en el museo” se hace un producto interesante y recomendado para todos aquellos que disfrutan con aventuras del estilo de “Jumanji”, a la vez que rememoran las historias y cuentos de su niñez y que no quieren dejar de disfrutar de esa etapa de sus vidas.