J. edgar
Reticente. Así es como se podría expresar mi postura ante la nueva película de Clint Eastwood. Ya que sus dos últimas películas, “Invictus” y “Más allá de la vida” me decepcionaron francamente. Y después de ver está ‘J.Edgar’, ha cambiado la palabra. Ahora es esperanza. Esperanza de que Eastwood retomé aquel cine que le hizo grande, véase, “Sin Perdón”, “Los puentes de Madison”, “Mystic River”, “Million Dollar Baby” o “Gran Torino”.
La película nos sumerge en la vida de John Edgar Hoover, que fue uno de los hombres más influyentes de la América de los años 30, llegando a ser el presidente de la Oficina Federal de Investigación (FBI) desde 1924 hasta 1974, cuando murió.
La película está contada a través de las historia de Hoover cuando está escribiendo los relatos de uno de los asuntos más turbios a los que tuvo que enfrentarse. Y mediante Flasback vemos la historia que Hoover narra a sus diferentes redactores.
Pero uno de los puntos en los que la película hace más hincapié es en su condición sexual. Durante el principio de la película podemos intuir que es heterosexual, pero cuando aparece en su vida Clyde Tolson (Magnífica interpretación de Armie Hammer) todo se vuelve nubloso, hasta el punto del que el propio espectador no sabe, si Edgar es homosexual o no. Dejando entrever por el final, que su condición sexual es algo que siempre quedará en el aire.
El peso del 98,2% de la película recae sobre el gran Leonardo Di Caprio. He de decir que hace unos años, Di Caprio, no me gustaba como actor, de hecho, aborrecía ir a ver alguna película suya. Pero desde que hizo aquella maravilla llamada ‘The Departed’ (Infiltrados) de Scorsese, he empezado a creer en este chico e ‘Inception’ (Origen’) me siguió dando la razón. Aquí esta simplemente soberbio, llevando todo el peso de la película, de los diálogos y de la acción sobre sí mismo. Su caracterización como el Hoover anciano, tb es magnífica (no tanto la de Hammer) y nos brinda una interpretación bastante excelente.
Y el 1,8% restante del film, recae sobre Armie Hammer, que interpreta a Clyde Tolson, el segundo de abordo en la Oficina. Hammer, ya estuvo bastante bien en la gran ‘The Social Network’ (La red social) y aquí esta correcto y llevando a su personaje a unas cuotas bastantes grandes. Es verdad que su personaje evoluciona poco, no como el de Hoover que evoluciona constantemente a lo largo del film. Pero una de las escenas de mayor peso dramático dentro de la película tiene su sello de que va a ser un gran actor y uno de los nombres a tener en cuenta para próximas películas. Por cierto… quien le haya hecho en maquillaje de viejo, se ha lucido.
Y una espinita que se ha clavado ha sido, Naomi Watts, no entiendo como para ese papel tan secundario, Eastwood ha contado con una de las actrices que mas me gustan. Ella pasa con pena ni gloria por la película. Una lástima.
Pero no todo alabanzas, la película también tienes sus fallos. En ocasiones se hace lenta, alguna vez a lo mejor te puedes perder por lo que te están contando, algunos episodios que deberían tener mucha más importancia pasan con puntillas por la película. Pero si te dejas llevar disfrutarás.
No es la película perfecta ni mucho menos. Pero después de ver las dos últimas películas de Eastwood aún queda esperanza en el director para ver que puede recuperar la senda del gran cine que ha hecho siempre.