La carretera (the road)
Sombrío y desolador relato basado en la novela del mismo título de Cormac McCarthy. Que trata sobre la destrucción del planeta tierra por un cataclismo en el futuro. Los árboles son esqueletos que crujen con la fría expiración del viento. Las carreteras y las casas están totalmente desiertas. Las almas en pena deambulan libres por las tinieblas. Todos los colores de la naturaleza se han mezclado en una lúgubre gama de grises, convirtiéndola en naturaleza muerta. El silencio incómodo es la única melodía que perciben tus oídos.En medio de este trágico escenario, un padre (Viggo Mortensen realiza un intensivo y desgarrador trabajo) lucha desesperadamente por sobrevivir junto a su hijo. Emprenderán un largo e interminable viaje hacia lo más profundo de la nada, hacia una muerte segura, o por desnutrición, o por suicidio. Un viaje en busca de comida, esperando a encontrarse un bunker repleto de abastecimientos. Su padre le enseñará a ser fuerte, a valerse por sí mismo. Pero él es sólo un niño inocente que necesita cobijo, protección y mucho cariño, ¡y que lo que debería estar haciendo es jugando con sus amigos al fútbol!. Tras el abandono injustificable de su mujer, el padre hallará la calidez y la felicidad necesaria para seguir adelante en los vivos recuerdos. Durante ese tenebroso camino deberán hacer frente a la triste realidad. Se encontrarán a su paso con supervivientes que, o bien están sumergidos en la locura, o bien practican el canibalismo (idea que añadió George A. Romero a sus zombis, en ‘Night of the living dead’), y no quiero decir por ello que esa sea la idea de John Hillcoat, ni mucho menos. Pero sí, la idea de la decadencia humana que se transforma en el instinto animal de subsistencia.
Además de la enternecedora y conmovedora relación entre padre e hijo. Los otros personajes como por ejemplo la madre (Charlize Theron), no aportan demasiado a la historia, quizás un poquito más de fuerza (el grito estremecedor del parto pone los pelos de punta). Porque ya en sí la historia te absorbe con creces. Otro personaje, el más enigmático y sugerente, es el viejo vagabundo (bueno en realidad son todos vagabundos, y van con carritos de la compra y todo) interpretado por Robert Duvall, que reflexiona sobre la vida, sobre si existe un Dios o no.
Si más dilación, la historia es emocionante, te seduce sin remedio alguno, aunque tenga algunos momentos previsibles en los que desconectas. Y ya se sabe como es el final en éste tipo de historias, en las que tiene como fondo el fin del mundo, pero en éste caso se aleja totalmente de lo convencional. Aunque si deja abiertas varias cuestiones, es un final muy sugestivo. Escenas sobrecogedoras de la extinción de una humanidad desquebrajada y de un mundo asolado por la muerte y la destrucción.
Lo mejor: Su ambientación apocalíptica.
Lo peor: Un final abierto.