Psicosis IV: El comienzo
Antes de que a Gus Van Sant se le ocurriera la brillante idea de volver a rodar Psicosis, en un acto descarado de "yo también quiero hacer esa película tan buena", en 1991 se estrenó esta sorprendente cuarta parte directamente para TV por cable y vídeo. Dirigida por Mick Garris, director mediocre pero que ha sabido entregar trabajos más que apreciables (como Critters 2 o Sensaciones extremas, de la serie Masters of Horror), Psicosis IV: El Comienzo es, como reza su título, una especie de precuela del original.Narrada por el mismísimo Norman, nuevamente interpretado por un estupendo y envejecido Anthony Perkins, el cual aprovecha un programa de radio para contarnos su historia, Psicosis IV nos da la oportunidad de conocer a su madre y como llegó Norman a convertirse en un auténtico psicópata. Bien rodada, con estilo, emulando correctamente al original, recuperando antiguos e interesantes elementos que merecían explicación, procurando que las incoherencias sean lo menos destacables posible. Interpretando a la madre de Norman tenemos a Olivia Hussey, y al joven Norman tenemos a Henry Thomas (sí, el niño de ET), en un papel bastante sorprendente.
Escrita por el guionista de la original, Joseph Stefano (autor, evidentemente, de la fotocopia que dio pie al remake de Gus Van Sant), Psicosis IV: El Comienzo es un apreciable thriller de terror con toques de drama que aclara muchos aspectos de la historia y cierra la saga definitivamente de una manera sobria y convincente. Muy superior a Psicosis III, esta precuela se merece una revisión porque, de verdad, no defrauda y resulta, cuanto menos, curiosa. Incluso su factura televisiva es correcta y, gracias a una fotografía de tintes contrastados y chillones, se hace aún más agradable.
Y, por si fuera poco, recupera el tema musical original, ya que en las entregas anteriores brillaba por su ausencia. A pesar de las apariencias, Psicosis IV es una muy buena película que, pese a contar todo aquello que quedaba simplemente apuntado en los films previos, lo hace de tal manera que el interés no decae en ningún momento. Un merecido 7,5.
Lo mejor: Lo bien rodada y escrita que está.
Lo peor: Alguna que otra situación algo forzada.