Sunshine cleaning
La portada engaña, no es una película al estilo Hermanos Cohen, aunque tenga puntos de humor negro y cómico suspense. El tirón de ‘Pequeña Miss Sunshine’ fue muy grande y sus productores han querido más, pero ‘Sunshine Cleaning’ es otra historia. Hay un niño, Oscar, muy parecido al virtuoso de ‘El Sexto Sentido’ (1999, M. Night Shyamalan); también repiten actor con Alan Arkin, quien consiguiera un oscar con su papel en Miss Sunshine; y por supuesto una misión.
Hay destellos de aquel humor negro, momentos de piña familiar y tragedia, pero en esta ocasión el protagonismo recae más en las dos hermanas, su pasado y su presente. Sus personajes son la noche y el día, la hippie-grunch Norah (Emily Blunt) y la hermana mayor, luchadora y perfeccionista Rose (Amy Adams).
También la directora Christine Jeffs nos da momentos de oscura introspección, deseperación y delirio que sufren los protagonistas como aquellos que vivía la Sylvia Plath que también dirigió Jeffs con la interpretación de Gwyneth Paltrow.
He de admitir que Amy Adams empieza a engatusarme como actriz. Principal o de reparto, la americana aporta soltura a la cámara. Primeros planos o generales, sus personajes van cargados de cafeína por la pantalla y son perfectos para un drama. Algo encasillada en sus papeles, pero, hasta lo que he visto, cumple su función.
Emily Blunt consigue con Norah plasmar una estructura en su personaje de fachada oscura y pasota pero de cimientos delicados. Es esa chica rara, despeinada, de permanente sombra de ojos que sueña con algo normalidad, respuestas y bucea entre recuerdos, fantasías y aventuras.
Ambas son ingredientes ideales para una tragicomedia con toques de humor negro, muy divertida y sentimental. El próximo viernes 23 de julio se estrena en España.