Semejante elenco de actores merecía un visionado. Tenía hambre de película pequeña, emotiva que recuperara un poco la tranquilidad de una cartelera plagada de secuelas y efectos especiales.
Y el inicio presagiaba una película amable con buenos momentos. Un De Niro contenido pero no demasiado volcado con su papel, unos secundarios guapísimos todos y también muy talentosos, una puesta en escena sobria con alguna que otra licencia onírica y una historia discreta y bastante previsible convierte esta propuesta nada original (precedente de una película italiana) en un film agradable. Y un buen intento de cine algo más sensible.
Un padre de familia no consigue reunir a sus cuatro hijos en casa, así que decide visitarlos por su cuenta. Mientras les ve, la idea que tenía de ellos, sobre su vida, su trabajo, va cambiando y se va desilusionando. Va descubriendo una realidad que tal vez maquilló o ignoró. Un padre que hace un repaso de su vida por todo USA.
Con ciertas reminiscencias de About Schmidt y Una historia verdadera, la película es una road movie familiar que peca de fria, pero a la que se la agradecen las buenas intenciones.
Lo mejor: El elenco
Lo peor: Le falta un hervor para ser un buen drama