El primer comic manga de la historia de Osamu Tezuka en su adaptación cinematográfica. “Soy un niño de verdad” decía Pinocho con bastantes paralelos al núcleo de esta historia.
Astro boy
La adaptación del trabajo de Osamu Tezuka que dio origen a una popular serie de televisión japonesa de los 60 llega al cine. Con su jóven protagonista robot con increíbles poderes que ha sido creado por un brillante científico doctor Temma para reemplazar al hijo que perdió accidentalmente. Sintiéndose incapaz de colmar las expectativas que el hombre ha depositado en él, se embarcará en un viaje en busca de aceptación, experimentará la traición y descubrirá un mundo de robots gladiadores en la tierra venida a menos, lejos de la isla flotante e idílica donde vive el resto.Este robot con cuerpo de niño y sentimientos de humanos tiene como particularidades vista de rayos X, súper-oído, mucha inteligencia, cohetes en sus botas y brazos, y 100.000 caballos de potencia, a lo que se agrega la posibilidad de disparar contra sus enemigos con dos pequeñas armas instaladas en su trasero. Es tirado a la tierra donde existe mayormente chatarra robótica donde en secuencias muy parecidas a los gladiadores romanos un inescrupuloso hombre los hace luchar hasta su destrucción y descubre en Astroboy a su nuevo gladiador. Metro City, es un paraíso de la isla flotando en el aire por encima de una tierra en ruinas que asemeja a otras cintas como Inteligencia Articial o la visión apocalíptica de Wall- E, donde los robots son demasiados y desechados sin ningún empacho. Es tanto el desecho humano que viven en este pedazo de tierra flotante un par de niños que acogerán a este biónico muchacho que siente el rechazo de los humanos. Este robot con rasgos humanos les enseña precisamente a los hombres que la guerra y la violencia es mala, no sin antes aplicar una dosis de la misma descubriendo sus superpoderes con los que fue creado. La cinta como entretención funciona de maravillas, aunque hay un poco de apresuramiento infantil en apurar la creación de astro boy y su auto descubrimiento. Pero que duda cabe que es sumamente vertiginosa de principio a fin. La animación por computadora de en Imagi Animation en Hong Kong le otorga la sencillez en su apuesta visual con tenues colores que tratan de recrear dicha época de su creación que a veces parecen forzados por problemas de economía neta. La cultura del usar y tirar junto con el maltrato a las minorías, son temas que hoy están mas vigentes que nunca y que este pequeño súper poderoso se encarga de recordarnos entre tanto láser, velocidad y patadas voladoras.