Saw 6
La sexta entrega de esta saga (Sí, sexta!) nos comienza relatando la muerte del agente especial Strahm, por lo cual el detective Hoffman se ha convertido en el tremendo sucesor del legado de Jigsaw. Con un último juego entre manos (cortesía del propio Jigsaw), Hoffman deberá cerrar el legado con el cual se ha comprometido, y asimismo escapar del continuo asedio del FBI sobre su persona.
Marcus Dunstan y Patrick Melton han sido los encargados del guión de esta sexta entrega, así como también de las dos entregas anteriores a esta. Y aquí creo, sinceramente, que se encuentra el gran problema de la película. El libreto de “Saw VI” tiene varios inconvenientes que me han perturbado durante todo su visionado. Es una película que tiene una urgencia enorme (y eso se nota en demasía!) en tratar de cerrar diferentes subtramas que no habían sido cerradas en entregas anteriores y que aquí por arte de magia comienzan a vislumbrarse diferentes salidas a todos los interrogantes que se nos habían planteado a lo largo de la saga. Si bien estoy de acuerdo con muchos críticos y espectadores en que la trama cierra de manera correcta y todo encaja de manera perfecta, la forma en la que se llega es a mi modo de ver francamente mala. Todo es demasiado conveniente, todo está armado con moñito, y todo, absolutamente todo encaja de una manera que cuesta demasiado creer, aunque esto sea cine.
No hay mucho para reprochar a nivel técnico. La película luce bien en cuanto a la dirección y diferentes movimientos de cámaras, en los cuales se utiliza el ya famoso y demasiado cansador modelo Mtv. Kevin Greutert ha sido el encargado de estar detrás de cámaras para este proyecto, luego de ser el responsable de la edición de las anteriores cinco entregas. Su trabajo ha sido bueno, pero lamentablemente ha tenido que lidiar con el hecho de tener que cerrar miles y miles de subtramas de anteriores cintas que lamentablemente han provocado en mí un hastío y un cansancio demasiado difícil de soportar.
En definitiva, “Saw VI” es una cinta que la mayoría de los espectadores disfrutará enormemente por poseer un guión en el cual diferentes interrogantes cierran a la perfección. Si bien esto es parcialmente cierto, creo que el producto cinematográfico en sí es demasiado pobre para ser considerado un buen estandarte de una saga que a partir de su cuarta entrega comenzó el camino descendente de manera vertiginosa. Está bien filmada, es sumamente violenta, y lamentablemente sigue de manera casi literal la mediocridad de las dos anteriores cintas de una saga que no da para más.