Crónica de una fuga
La historia fue adaptada por un grupo de tres guionistas (Adrián Caetano, Esteban Student, Julián Loyola) basándose en la novela escrita por uno de los sobrevivientes del suceso que se relata en la película, Claudio Tamburrini. Y así, la historia nos irá adentrando dentro del terrible flagelo vivido por este muchacho (y por otros cuantos más) cuando es raptado por las fuerzas militares que gobernaban el país en aquella época y llevado a uno de los tantos centros clandestinos de detención que actuaban bajo la órbita del proceso reinante.
Vale decir sin lugar a dudas que el libreto del filme se encuentra estupendamente narrado. Caetano sabía que tenía en sus manos una historia interesantísima para su adaptación cinematográfica, por lo cual debía centrar todas sus energías en el drama vivido por los chicos secuestrados, aspecto que en el filme se encuentra sumamente bien cuidado. Sin problemas en lo que respecta a lo narrativo (la película se pasa volando), el filme toma un excelente ritmo desde un comienzo, basándose en las penurias y humillaciones sufridas por los detenidos durante aquel tiempo.
Israel Adrián Caetano (“Pizza, Birra y Faso”, “Un oso rojo”, etc) fue el encargado de dirigir una cinta para nada fácil de encarar desde el punto de vista visual. El cineasta acierta sin lugar a dudas en el hecho de no mostrar en primeros planos ningún tipo de tortura, por lo cual toma el camino más recomendable para el filme que es la utilización del recurso del fuera de campo, con el que además la película adquiere un contenido dramático muchísimo más palpable. En aspectos más técnicos, es muy interesante ver como Caetano utiliza la cámara arrastrándose a centímetros del piso durante muchísimos pasajes del filme, mostrando una miseria y un desasosiego tremendo que se apodera de la pantalla a lo largo de todo el metraje de la cinta. En definitiva, una buena dirección para un filme muy cuidado en todos sus rubros cinematográficos.
Rodrigo De la Serna fue el encargado del rol protagónico de la cinta, brindando una actuación que es de lo mejor del filme, interpretando a un muchacho (Claudio Tamburrini) a quien de la noche a la mañana le cambia completamente la vida cuando es secuestrado. De La Serna nos regaló en su actuación un poco de todos los ingredientes que su personaje debía tener. Temor en un comienzo, sorpresa por la inesperada situación y valentía cuando comienza a darse cuenta de que sólo podrá confiar en lo que él y sus compañeros puedan hacer para salir de semejante situación.
Otra actuación para destacar es la de Pablo Echarri (excelente su performance), como uno de los represores a cargo de su caso (tal cual como ellos les gusta decir en el filme), demostrando el porqué es a mi entender uno de los mejores actores de los últimos tiempos. Dándole a su personaje un lineamiento detestable desde el primer fotograma, Echarri redondea una muy buena actuación durante gran parte del filme.
En definitiva, “Crónica de una fuga” es sin dudas una gran película sobre una trágica época de nuestro país. Una época que nadie quiere que se repita bajo ningún punto de vista, por lo que el filme cobra un valor adicional al estrictamente cinematográfico. Muy recomendable en todo sentido.