Dark matter
Dirigida por el oriental Chen Shi-zheng la cinta recorre parte de la vida de Xing un prominente estudiante de cosmología chino que se une en EE. UU. a un selecto grupo bajo la dirección del famoso cosmólogo el Profesor Jacob Reiser (Aidan Quinn) buscando su doctorado y descubrir lo secretos de la materia negra. Se esmerará para sorprender a su profesor y a otro grupo de compañeros que están en la búsqueda de la glorial. Buscará crear y perfeccionar un modelo acerca de los orígenes del universo sobre la base de la teoria Raser, su mentor. Su profesor en un inicio lo convierte en su protegido. Xing está obsesionado con el estudio de la materia oscura una sustancia invisible en el universo, y una teoría de que los conflictos con el modelo de Reiser. Cuando Xing comienza hacer grandes avances acerca del tema comienza a encontrar obstaculos en sus mismos pares y su mentor cayendo en la desilución. Su único apoyo proviene de una colaboradora de la alta sociedad que mata su tiempo libre guiando a los estudiantes extranjeros (Meryl Streep).
Muy relajada dirección que denota alguien fuera de Hollywood tras las cámaras. Se rescata la sinceridad de un relato que mezcla la ficción y realidad buscando adentrarse en la suerte de muchos inmigrantes que van por el sueño americano pero esta vez en las ciencias y de cómo los celos profesionales y las ansias de lograrlo rápidamente son un también un obstáculo. Asímismo el adoctrinamiento cultural y aceptación hacia los estranjeros, son temas tocados tangencialmente que sin duda colabora al desenlace poco afortunado del personaje. El hecho de dividir en actos la cinta tampoco aporta demasiado al relato, más bien es algo forzado en cada secuencia. El material de la cinta es sumamente atractivo pero carece de dosis más dramáticas con poca empatía hacia el espectador en hacerle sentir con un poco más de nervio la debacle de un ser que partió con muchas ilusiones y que una vez desencantado puede hacer algo brutal debido a la retención constante de sus emociones que pueden estallar de forma violenta. Buena factura técnica de la cinta y una banda sonora agradable que mezcla diversos géneros de la música dependiendo del estado de ánimo de su protagonista que es uno de los puntos rescatables de una cinta que no consiguió mayor conexión con el espectador a pesar de contar con la participación de Meryl Streep y Aidan Quin.