Recount
HBO, con gran renombre dentro de la televisión por cable, siempre tiene en su currículum envidiables producciones para televisión. Tanto series como "John Adams" o films como "Vida y muerte de Peter Sellers". En este caso se dan un paseo ocho años atrás y le da un jugoso cacho de historia americana reciente a un director especializado en comedias, Jay Roach.
El caso del recuento de votos en el año 2000, cuando competían por la presidencia a la Casa Blanca Gore y Bush, es el tema central de este drama de planteamiento maniqueo pero de factura y realización muy decentes.
Obviamente los republicanos de esta película son estirados, cuando no feos, bordes o brutos. Basta escoger a un canoso Tom Wilkinson, un barbudo Bob Balaban o una ridícula Laura Dern. Los demócratas, con Kevin Spacey y Denis Leary a la cabeza, son los maltratados, los guays, los que tienen que soportar la tiranía, prepotencia e ignorancia de los republicanos y además, las víctimas de un robo de unas elecciones. La posición ideológica del film es clara y contundente, así que sabiendo eso ya no engañan al espectador objetivo.
El caso es que el film, aparte de una loa hacia la izquierda y los demócratas, es un instructivo y vibrante paseo y un clarificador documental sobre las estrategias, infraestructuras, equipos humanos y recursos judiciales que se usan en USA en temas como la política o las elecciones. No sólo consiguen explicarnos cómo funciona su sistema de elección presidencialista, sino que además nos hacen partícipes de un juego de fuerzas que usan todas las tretas posibles para conseguir su objetivo: que su candidato gane las elecciones.
Este film sería impensable en España en la actualidad a menos que el PSOE perdiera las siguientes elecciones: con propaganda también se ganan votantes, y esta película sería su Biblia.