Sencilla y efectiva historia que sirve como terapia a un arquitecto que viaja al norte de la Argentina a comprar unos terrenos mientras vive su separación.
Una estrella y Dos Cafés
Una sencilla película que narra parte de la vida de un arquitecto que es enviado al norte de la Argentina para realizar la compra de unos terrenos para la construcción de un complejo turístico. En su estadía conoce a la pequeña Estela de 13 años que se trasforma en su guía y amiga pero la pequeña se encariña demasiado con un inmenso amor platónico hacia él, cambiándole la existencia en un pueblo donde no ocurren muchas cosas, comienza a arreglarse para verse mas linda para Carlos. Lo que no sabe la pequeña que Carlos viene saliendo de una separación y pronto su mujer irá a encontrarse con él desatando sus primeros celos de amor de la pequeña con una inocencia entrañable generando mucha simpatía y ternura en esos tramos de la cinta. Emotiva y humana historia sobre seres marginales que viven cerca del desierto y en el extremo sur del planeta, es la Argentina menos vista, alejada del gran Buenos Aires, aquí abunda la gente sencilla, de piel con su vida cotidiana, mucha quietud y sin mayores sobresaltos, lado opuesto a lo vivido en las urbes que le sirve a este arquitecto junto a la naturaleza reinante y su amiga inocente a descubrir lo que realmente importa en la vida y que nunca es tarde para retomarlo.Alberto Lecchi, realizador de “Nueces para el Amor”. reúne nuevamente a sus protagónicos a Gatón Pauls y Adriana Gil en un cine donde las personas, sus anhelos y vivencias son las protagonista con un inmenso telón de fondo de un polvoriento pueblo donde la humildad y sencillez a veces da sana envidia. Hay que destacar el trabajo del director en la utilización de personas sin formación actoral en esta película como la pequeña y dulce niña que interpreto a Estela.
