Pandoranin kutusu
Tres hermanos de cuarenta y tantos años reciben una noche en Estambul una llamada diciendo que su madre, ya mayor, ha desaparecido de su casa de la costa del Mar Negro.
Los tres (dos mujeres y un hombre) parten en su búsqueda, aparcando momentáneamente sus problemas.
Una vez juntos, se deja ver rápidamente la tensión existente entre ellos, como si, de repente, se hubiera abierto la Caja de Pandora.
Se dan cuenta de que, en realidad, apenas se conocen y se ven obligados a reflexionar sobre sus propios defectos.
Interesante film presentado en la Sección Oficial del Festival, coproducida entre nada menos que cuatro países: Turkía, Francia, Alemania y Bélgica.
El resultado es atractivo por lo conmovedor de su historia, llena de lecciones de vida, sencillas, eficaces, a cargo de la abuela aquejada de Alhzeimer, que sus momentos de lucidez, enseña el camino a seguir en la vida a sus nietos, que a su vez son los únicos que se preocupan y logran darle a la señora cariño, amor y comprensión. Los propios hijos de la enferma no quieren responsabilizarse de ella por tener sus vidas hechas y/o completas.
Hasta el momento, quizás la película a concurso que más se adecúa a lo que debe ser un Festival de la categoría de Donostia, por cumplir con las espectativas (no exigidas, por otro lado) de ofrecer al espectador historias llenas de elementos positivos, por más que sean a la vez dolorosos y amargos.
Una buena cinta a la que únicamente hay que ponerle la pega de que se haga un poquito larga en su primera mitad, pero que una vez entrada en materia y conocedores de la psicología de los diferentes personajes se torna emotiva y acaba gustando bastante.
Mi calificación: 6,75