Bienvenido a Farewell-Gutmann
Tres solventes actores, Ana Fernández, Adolfo Fernández y Lluís Soler, se meten en la piel de depredadores que no aguardan a que su presa muera de agotamiento o enfermedad. Quizás las interpretaciones conformen el puntal de esta propuesta teatral y arriesgada (todo se rodó en un mismo plató), la de los tres protagonistas y también la de los cuatro actores en los que se apoyan para dar rienda suelta a su ferocidad.
El debutante Xavi Puebla ha conseguido estrenar su inteligente ejercicio sobre la ambición, un sentimiento que nos llega con toda su frialdad en una propuesta bien armada que, junto a Smoking Room, El método y Casual Day, completa por ahora el fresco que dedica el cine español a las relaciones laborales.
Con una inquietante banda sonora, premiada en el pasado Festival de Málaga –así como el trabajo de la protagonista-, una perseguida austeridad de medios y una fotografía que rezuma esa frialdad de la que hablábamos, Bienvenidos a… se disfruta como un perspicaz aunque en ocasiones demasiado estricto tratado acerca de los lazos de poder, los que se dan tanto en el juego sexual como en el mundo empresarial… Si al final no nos va a extrañar que, como apuntaba Ana Fernández, en los parones durante el rodaje hablasen mucho de sexo.
Por cierto, ¿cuándo veremos una película en la que los protagonistas sean los actores que dejan aparcadas sus ilusiones por culpa de un despiadado director de cásting? Sería divertido y muy valiente.