Año uno
Me acuerdo como en “10.000” de Roland Emmerich, o en “Apocalypto” de Mel Gibson se ponía a caldo la poca verosimilitud que había entre lo que se contaba y lo que había pasado en realidad en la historia, sin embargo, de la infame “Año Uno” no he oído nada de eso, será porque en esta comedia de Harold Ramis (que no parece dirigir él sino que parece que se deja llevar/aconsejar por Jack Black) parece que “todo vale” con tal de causar la risa o el esperpento del espectador.
Vale, admito que he visto la película con unas pretensiones bajas, bueno, más que bajas por los suelos, y que me esperaba la morralla que finalmente ha sido (y como ha sido), y que en hora y media de proyección solo he esbozado un par de sonrisas y solo en las partes de humor escatológico y es que, los que me conocéis ya sabéis que soy muy de caca, culo, pedo (especialmente de esto iba el gag que más gracia me ha hecho), pis…
Los mejores momentos están en el trailer, o en los anuncios televisivos que han repetido una y otra vez en la promoción de la película, así que lo poco que puede llegar a sorprender, no lo consigue y la sensación de “esto ya lo he visto” o “esto ya me lo sabía” hace que pierda el factor sorpresa. Señores encargados del marketing de una película SI PONEN LOS MEJORES MOMENTOS EN EL TRAILER EL RESTO PIERDE LA GRACIA, aparte que hacerlos lineales pierden también mucho interés por la misma…
Jack Black como siempre, haciendo su personaje habitual, de hecho Black va a empezar a ser de esos actores como J.Lo o Meg Ryan, que no son el personaje sino la actriz (o el actor) en determinados momentos, ya que esta película podía haberse llamado perfectamente Jack Black en los primeros compases de la historia (o algo parecido)… Por otro lado tenemos a Michael Cera, al que descubrí en “Supersalidos” y redescubri en “Juno” pero que aquí se deja llevar por Black y no es más que la mera comparsa que acompaña al “héroe” por llamar de alguna manera al rol de Black.
Acompañan a estos Olivia Wilde, Christopher Mintz-Plasse (otro de los “Supersalidos”), Vinnie Jones, David Cross, Oliver Platt y el propio director de la cinta Harold Ramis en un pequeño y excéntrico papel.
En fin, dadas mis bajas pretensiones hacia la cinta, tampoco he visto nada del otro mundo, una comedia mierdera de esas que se hacen en Hollywood para cubrir el expediente o como vehículo de lanzamiento de un actor o actriz determinado.