Gritos en el pasillo
Sé que hice referencia a esta película en mi opinión sobre “Érase una vez un cuento al revés…”, pero no ha sido hasta una conversación con mi cuñado, fiel lector de esta página (aprovecho para mandarle un saludo !!Hola Joselito!!), cuando me he visto empujado a ver la cinta, que si bien él calificaba con un mero experimento, que había que ver, fue la curiosidad y su opinión lo que me llevo a comprobarlo por mi mismo.Es una manera original, jamás vista, esta de animar con cacahuetes y demás frutos secos, que no cae en saco roto, desde luego, pero que a pesar de la excelente banda sonora, deudora del cine de Tim Burton (y con ciertos toques de sonoridad con el gran Danny Elfman), se quede en eso, en una mera anécdota, de poca duración (hora y cuarto nada más), que con un lenguaje propio y con un argumento deudor del cine de terror y suspense, consiga solo interesar un poco por lo original de su plateamiento.
Y es que, los cacahuetes apenas expresan nada, y uno en algunos momentos piensa que está perdiendo unos min. preciosos en hacer cualquier otra cosa, y no en ver como dos tipos mueven una y otra vez unos “panchitos” por la pantalla, a parte del doblaje, que parece de esos hechos por 2 coleguitas en plan coña total.
En fin, estoy de acuerdo con la opinión de mi cuñado, y es que, como el dijo, la cinta se queda en un mero experimento, que, como la gaseosa, merece la pena hacerlo en casa y después guardarlo en un cajón, lo más alto posible de la vista de los demás.
Lo mejor: La originalidad de su planteamiento, eso de animar cacahuetes queda muy gracioso...
Lo peor: Se hace sosa, aburrida y pesada, y uno no puede olvidar que a fin de cuentas esta viendo una cinta de cacahuetes.