Desmontando a Harry
Los films de Woody Allen se podrían dividir en miles de subgrupos. Las cómicas de sus inicios, las serias “a la Bergman”, las inocuas, las geniales, las últimas estándar a piloto automático, etc. Pero vamos a hablar de su mejor película de esta última etapa: Desmontando a Harry. O mejor dicho, Desmontando a Allen.Film diferente y a todas luces exagerado, una especie de Woody Allen reloaded. Ya desde su inico, se nota la finalidad de Allen por provocar. Un montaje furioso y entrecortado –usado en todo el film, inédito en su cine- marca la diferencia. Y ni hablar de su humor políticamente incorrecto. Muy incorrecto.
A pesar de ser el protagonista –Harry Block- un monstruo sin aparentes virtudes mas que las literarias, se torna querible e irresistible. ¿Será por el propio Allen? ¿Es este personaje una faz mas sarcástica de él mismo?
Los elementos biográficos puestos aquí son un espejo –su relación con el psicoanálisis, el sexo y la religión- y asi lo hacen parecer. Aunque pensandolo un poco, su historia con la coreanita no desentonaría para nada en este guión.
A diferencia de las últimas entregas de Allen, ésta nunca pierde su arrollador ritmo. Decíamos antes un montaje nervioso y a la vez brillante. Un film que trata mal a las mujeres, a la religión toda, al psicoanalisis tan amado, a la clase media americana e incluso, a él mismo. Una rareza por su grado de acidez.
Los gags y los diálogos son inmejorables. Pocos en su cine tan imaginativos como el del actor que está desenfocado (Robin Williams ja!). O el de la muerte tocando la puerta. Y podríamos señalar más.
Los chistes sobre el judaísmo son hilarantes: “Ya se que perdimos 6 millones pero los récords estan para ser superados” “¿Qué tiene de malo la ciencia? Entre el aire acondicionado y el Papa, me quedo con el aire acondicionado”. O una de sus ex mujeres reprochandole que le enseña a su hijo en común frases como “me cago en Dios”.
El desfile de actores de nivel es interminable, demostrando una vez mas el prestigio y la importancia del cine de Allen. La suma de personajes y las infinitas historias de esta película, demuestran un manejo prodigioso del timming, donde nunca llegan a mezclarse o a cansar. Y eso que muestra los personajes del film mas los imaginarios mas los personajes de su libro mas… uff. Genial.
La gente amó Match Point, pero sabemos que esa gente es la que no gusta de Allen. Woody es esta película, por principios, por inteligencia, por cinismo, por esencia y por calidad también.
Yo me animaría a decir que dejando de lado sus clásicos indiscutibles –Annie Hall, Manhattan, Crimenes y pecados, esta Desmontando a Harry es sin dudas, su mejor film. O el que mejor lo representa.